Destete Nocturno: Cómo quitar las tomas nocturnas

El destete nocturno es un tema que muchos padres abordan en algún momento del desarrollo de su hijo. Este proceso consiste en dejar de alimentar al bebé durante la noche, ayudándolo a dormir de manera continua hasta la mañana. Es una transición importante tanto para el pequeño como para los padres, y es fundamental hacerlo de manera respetuosa y adaptada a las necesidades del bebé o niño.

¿Qué es el destete nocturno?

El destete nocturno se refiere al proceso gradual de eliminar las tomas de leche (ya sea materna o de fórmula) que el bebé realiza durante la noche. El objetivo es que el niño aprenda a dormir durante toda la noche sin necesitar alimentarse, lo que no solo mejora el descanso del bebé, sino también el de los padres.

Pautas para lograr el destete nocturno

El destete nocturno es un proceso que requiere paciencia y comprensión. Aquí tienes algunas pautas para llevarlo a cabo con éxito:

• Reduce Gradualmente las Tomas Nocturnas: Si tu bebé se alimenta varias veces durante la noche, empieza reduciendo la cantidad de leche que le ofreces en cada toma, o bien, alarga el tiempo entre una toma y otra.
• Introduce Alternativas de Confort: En lugar de alimentar al bebé cada vez que se despierte, ofrécele otras formas de consuelo, como un abrazo, una caricia o un chupete.
• Establece una Rutina de Sueño: Las rutinas ayudan a que el bebé entienda que después de ciertas actividades, es hora de dormir, y que no necesita despertarse para comer.
• Hazlo en un Momento Adecuado: Elige un momento en el que el bebé esté sano y no esté pasando por grandes cambios como dentición, una mudanza o la llegada de un nuevo hermano.

¿Cuántos días dura el destete nocturno?

La duración del destete nocturno varía dependiendo de cada niño y de cómo se lleve a cabo el proceso. En general, puede durar entre una semana y un mes. Es importante no apresurarse y permitir que el bebé se adapte a su propio ritmo.

¿En qué casos no se aconseja el destete nocturno?

El destete nocturno no siempre es aconsejable, especialmente en ciertas circunstancias:

• Si el bebé es menor de 6 meses: A esta edad, los bebés aún necesitan alimentarse durante la noche para su crecimiento y desarrollo.
• Si el bebé está enfermo: Si el niño está pasando por una enfermedad, es mejor esperar hasta que esté completamente recuperado antes de comenzar con el destete nocturno.
• Si hay regresiones del sueño: Durante períodos de regresión, el bebé puede necesitar más consuelo y alimentación nocturna.

Problemas comunes durante el destete cocturno según la edad del pequeño

El destete nocturno puede presentar diferentes desafíos según la edad del bebé:

• Bebés de 6 a 12 meses: Pueden resistirse al cambio y despertar más veces buscando consuelo. Es importante mantener la calma y ser consistente.
• Niños de 1 a 2 años: A esta edad, el niño puede estar más apegado a la lactancia como fuente de confort, por lo que el destete puede ser más difícil y requerir más tiempo.
• Niños mayores de 2 años: Aquí, el destete puede coincidir con otros cambios importantes, como la transición a una cama de «niño grande». Es esencial ser muy paciente y comprensivo.

¿Cuándo se puede empezar con el destete nocturno?

El destete nocturno generalmente puede iniciarse entre los 6 y 12 meses, cuando el bebé comienza a consumir suficientes sólidos durante el día y ya no necesita tantas tomas nocturnas para mantenerse nutrido. Sin embargo, cada bebé es diferente, y es importante asegurarse de que el niño esté listo para esta transición.

¿Cómo hacer el destete nocturno y que se duerma solo?

El destete nocturno y la capacidad de que el niño se duerma solo están estrechamente relacionados. Aquí algunos consejos para lograr ambos:

• Fomenta la Independencia para Dormir: Desde el principio, trata de que tu bebé se duerma en su cuna o cama, despierto pero somnoliento. Esto ayudará a que se acostumbre a dormirse solo.
• No Reemplaces una Toma por Otra Actividad: Evita crear nuevos hábitos que dependan de tu presencia, como mecer al bebé hasta que se duerma.
• Mantén la Calma y Sé Consistente: Los niños perciben el estado de ánimo de los padres, por lo que es crucial mantener la calma y ser coherente en la aplicación de las nuevas pautas.
• Incrementa el Tiempo entre Despertares: Si tu hijo se despierta, espera un poco antes de acudir, para darle la oportunidad de volver a dormirse solo.

El destete nocturno es un proceso que puede parecer desafiante al principio, pero con paciencia, consistencia y mucho cariño, tanto el bebé como los padres podrán disfrutar de noches más tranquilas. Recuerda siempre adaptar las pautas a las necesidades de tu hijo y a tu situación particular.